02 agosto, 2004

Pequeña carta a mi otro yo

A ti te escribo, de ti estoy hablando. Si, tu… deja de hacerte el loco, en esta habitación estamos solos, tu y tu propio reflejo que debo ser yo. Tu, la parte perdida, el lado oscuro de mi mirada, el que vive agazapado comiendo las sobras de los besos. El mezquino, el que esconde su cobardía tras perfectos planes de auto preservación, el cuerdo, el que tira la piedra y esconde la mano, el que pide el último ron, el niño. El que pase lo que pase se agarra a mi pierna y esconde la cara en mi pecho, el que te busca en los rincones del olvido, el mentiroso, el que no se levantaría de la cama. Por que lloras? Acaso intentaste mantenerme la mirada? No puedes, te retuerces, pataleas. Eres tú el que pasas frío en agosto, el que todavía la recuerda, el que monta en cólera cada vez que no claudico. Poco rato te quedaría al otro lado del espejo si supiera como vivir sin ti…

Follet